EJES PROGRAMÁTICOS CANDIDATO CONSTITUYENTE
La soberanía reside en las personas que habitan el país.
La actual constitución fue impuesta en la Dictadura, sirviendo a los intereses de un grupo reducido en desmedro del pueblo de Chile.
La demanda por una nueva constitución surge de la indignación ante las insostenibles condiciones de vida en Chile .
Chile es uno de los países más desiguales en calidad de vida y distribución de ingresos entre sus habitantes.
La redacción de nueva constitución marca un hito dentro del ejercicio permanente de ajustar nuestras reglas como sociedad a un contexto cambiante.
Nuestra propuesta busca reflejar problemáticas transversales de las bases y de la sociedad civil. Es por ello que los ejes programáticos que se presentan a continuación, son preliminares y se encuentran en permanente construcción:
1. CONSTITUCIÓN ECOLÓGICA
A diferencia de la actual constitución, sus definiciones iniciales deben basarse en el territorio y todas las formas de vida en su conjunto, así como los ecosistemas que componen y de los cuales las personas formamos parte integrante. El medio ambiente no es un ámbito más, sino que es todo el entorno en que nos encontramos inmersos y debe ser reconocido, valorado y protegido en la nueva constitución.
2. DESARROLLO SUSTENTABLE
El desarrollo sustentable por definición incorpora la esfera ambiental, la social y la económica, las cuales se suelen graficar intersectando al centro, dando cuenta de un punto de equilibrio necesario entre las tres.
3. GOBERNANZA DESCENTRALIZADA Y PARTICIPATIVA.
Una nueva política fiscal que permita una repartición y gestión equitativa de la recaudación de impuestos en los territorios, sin incentivos perversos que justifiquen el desarrollo de actividades económicas que generan impacto ambiental. Una reformulación íntegra al sistema tributario chileno, con miras a reforzar su carácter progresivo, obteniendo de los sujetos con mayor capacidad de pago, los recursos que permitan el cumplimiento de los fines estatales y en especial, aquellos que garanticen el financiamiento de los derechos sociales.
4. EDUCACIÓN GRATUITA Y DE CALIDAD.
La educación verdadera es una experiencia vivencial; reflexión y acción de la persona sobre el mundo para transformarlo, y como tal debe abrir las puertas a la realidad social, económica y política de nuestro país.
En consecuencia, la mejor inversión que puede hacer el Estado y el mayor buen augurio futuro, es garantizar educación gratuita y de calidad para quien la quiera, sin distinguir ni limitar a las personas según el grupo socioeconómico al que pertenezcan, a su género, edad u origen. De ello también resulta esencial la acción de educar, y el valor primordial que hay en quienes educan.
El sistema escolar chileno subsiste en una crisis sistémica, derivada de la mercantilización de la educación, considerándola un servicio de consumo, a la deriva entre la oferta y la demanda, convirtiendo indirectamente a su vez a la propia alumna o alumno en un bien de consumo (o fuente de subsidio según el caso).
5. SALUD Y BUEN VIVIR
Es necesario concebir la salud como el disfrute del más alto nivel de bienestar físico, mental y social, en lugar de la definición actual de ausencia de enfermedad.
6. NIÑEZ
La Convención sobre los Derechos del Niño (1990) supone un cambio en la forma de comprender a la niñez. En la actualidad se reconoce a niños, niñas y adolescentes el carácter de Sujetos de Derecho, quienes se encuentran en tránsito hacia la autonomía plena. Esta autonomía se va desarrollando desde crecientes ámbitos de toma de decisiones y expresión de opiniones, en donde la guía y orientación de los padres retrocede en la medida en que avanza la capacidad de ejercer personalmente los derechos, conforme al ciclo vital.
Por otra parte, y desde un enfoque ecosistémico, niños, niñas y adolescentes se encuentran en constante relación e interacción con los distintos ámbitos en los cuales se desenvuelven; en ese sentido, tanto la familia, como la sociedad y el Estado son considerados como Garantes de Derechos, teniendo distintos niveles de responsabilidad en cuanto a su cuidado, crianza, educación, guía, orientación y protección de sus derechos.
7. CULTURA Y PATRIMONIO
La cultura es una manifestación permanente, espontánea, natural, inmemorial, inherente a las comunidades, a través de la cual se construyen nuestras identidades. De esta forma se genera contenido con valor simbólico, expresando su capacidad creativa. Gracias a la cultura existen las ideas, las representaciones, el lenguaje y las producciones que se desprenden de las condiciones antropológicas e históricas que portamos.
8. EQUIDAD E IDENTIDAD DE GÉNERO
Paridad como presencia equilibrada entre hombres y mujeres en los órganos colegiados de la Administración del Estado y del gobierno, en todo el territorio nacional.
Derecho a la salud sexual y reproductiva, derecho a la maternidad voluntaria y a su protección. Obligación de los poderes del Estado de asegurar que la opción de la maternidad no implique obstaculizar los derechos de las mujeres como acceso al empleo, a la educación o a cargos públicos.
9. TRABAJO DIGNO
El trabajo suele ser entendido en lo inmediato y tangible como una fuente generadora de ingreso necesario para la subsistencia de una persona y muchas veces del grupo familiar completo. A su vez, la fuerza laboral permite desarrollar la transformación de recursos, noción relacionada al crecimiento económico, de acuerdo a un modelo de desarrollo que cuestionmos fuertemente. Existe, sin embargo, una esfera tanto o más importante, cual es el trabajo como dignificador de la persona, en cuanto permite mayores grados de realización personal y colectiva, siempre y cuando se realice en equilibrio con otros ámbitos del bienestar.
Reconocemos grandes progresos en la legislación laboral chilena, en especial tras la reforma del año 2009, tras la cual el Derecho laboral transita hacia una lógica de principios rectores, recogiendo el principio de la primacía de la realidad, y procedimentales de oralidad e inmediatez, agilizando los procesos laborales y de cobranza laboral y previsional, además de la creación de una defensoría laboral gratuita. Valoramos igualmente la institución de la nulidad del despido, y los avances realizados en cuanto a reconocer y condenar las prácticas antisindicales. Lo propio respecto de la Ley de subcontratación y de empresas de servicios transitorios.
